Homenaje al poeta Leopoldo de Luis por partida doble

Con una exposición y la entrega de premios de su certamen literario

Fue cordobés, pero tetuanero de adopción. No en vano, aquí pasó los últimos 70 años de su vida desde que llegara, en 1935, a la calle de Jerónima Llorente. Ahora, cuando se cumplen siete años de su muerte, el poeta Leopoldo de Luis recibe de “su” barrio un doble homenaje: con la entrega de galardones del certamen literario que lleva su nombre, y con una exposición sobre su vida y obra, que puede visitarse en el centro cultural Eduardo Úrculo (Plaza de Donoso, 5), hasta el 21 de diciembre.

Libros, fotografías y objetos personales, tales como su máquina de escribir, se exhiben en esta muestra que da testimonio de su talla creadora, su compromiso social y de sus múltiples vivencias, como el paso por cárceles y campos de concentración, tras haber combatido del lado republicano durante la Guerra Civil. Además, los visitantes pueden contemplar imágenes que atestiguan la intensa relación que el Premio Nacional de Literatura y de las Letras mantuvo con otros grandes poetas como Vicente Aleixandre, Antonio Machado o Juan Ramón Jiménez. “Además de todo ello, fue un vecino ejemplar”, relata José María Carras-cal, presidente de la Comisión de Cultura y miembro del jurado del certamen, que le conoció de cerca.

UN CERTAMEN CONSOLIDADO

Por cuarta vez se entregaban los galardones de un premio que va consolidándose dentro y fuera del distrito y que, en esta edición, recibió 502 trabajos, un 18% más que en 2011. Jesús Montiel y su Díptico otoñal, en poesía, y La bestia humana, de José Manuel Moreno, en relato, se alzaron con los máximos triunfos en esta ocasión. Este último –autoproclamado “analfabeto” y “mejor cuentista de mi nación, ¡Tetuán!”–, ya se había quedado a las puertas de lograr el premio el pasado año.

Los accésit fueron para Gloria Fernández y su Beso otoñal, en poesía, y para La cueva del cura, de Pedro Bonilla, en relato. Como novedad en esta edición, el jurado ha concedido por primera vez dos menciones especiales para las obras de Yapci Bienes y Elena Román. Un jurado que, como en anteriores ocasiones, contó, entre otros, con la presencia de la concejal-presidenta de Tetuán, Paloma García Romero, del poeta y ex secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, y del también poeta y ensayista –e hijo de Leopoldo de Luis– Jorge Urrutia, quien destacó “la heroicidad que hoy supone, con la que está cayendo, que alguien se recoja en su soledad para escribir poesía o relatos”. Que fue, precisamente, lo que hizo su padre en una época quizá no mejor. Y tanto que se lo agradecemos.

David Álvarez de la Morena