EL PERI TIZIANO-DULCINEA VE LUZ AL FINAL DEL TÚNEL

Las movilizaciones de los afectados empiezan a dar sus frutos

La polémica sigue envolviendo todo lo que se mueve en torno al Plan Especial de Reforma Interior (PERI) Tiziano-Dulcinea. Esta actuación urbanística se inició hace ahora 15 años, por medio de la iniciativa privada. La creación de una Junta de Compensación para llevar adelante el PERI hizo que muchos de los vecinos afectados no se adhirieran a ella, y hoy todos ellos están realojados, en los edificios construidos en la zona. Sin embargo, quienes sí decidieron confiar en esa junta se encuentran en la actualidad sin vivienda; en total, más de 500 personas, que se han visto obligadas a constituir la Asociación de Víctimas del Urbanismo, por lo que consideran “un monumental atropello social”. Quienes padecen y sufren esta realidad cargan sus protestas contra la empresa Somersen Inmobiliaria, que era la encargada de construir sus pisos, y el Banco Pastor: “Han hipotecado de forma traicionera el suelo y las viviendas”, aseguran. En el caso de la compañía inmobiliaria, su propietario “ha admitido la resolución de las transmisiones por las que llegó a adquirir nuestras propiedades, y sólo queda que se concrete la cuantía de la indemnización por los daños y perjuicios que nos ha causado”. Sin embargo, el Banco Pastor había anunciado la subasta de los terrenos donde se han de edificar los pisos de los afectados, y el pasado 6 de septiembre iba a tener lugar la primera de ellas, en los Juzgados de la calle del Capitán Haya, 66. Sin embargo, una juez paralizó la misma en el último momento, para alegría de los afectados, que son conscientes de que “la culminación de la estafa estaría en las subastas de los terrenos y entonces sí que lo perderíamos todo”. MÁS SOLUCIONES Otro atisbo de una posible solución favorable para los afectados por este PERI es el expediente remitido desde el Área de Gobierno de Urbanismo, Vivienda e Infraestructuras del Ayuntamiento de Madrid, a través de la Dirección General de Gestión Urbanística. En el mismo se expresa literalmente que estos Servicios Técnicos entienden que “se ha producido un incumplimiento de los deberes, obligaciones y compromisos inherentes al sistema de compensación del PERI Tiziano-Dulcinea, que impide y dificulta apreciablemente la conclusión de la ejecución, con grave perjuicio para el interés público y para los intereses legítimos de terceros”. Esta declaración de incumplimiento conllevaría –de conformidad con lo dispuesto en el artículo 103.1 c) de la Ley 9/2001 de 17 de julio de la Ley del Suelo de la Comunidad de Madrid–, “la sustitución del sistema por uno de ejecución pública, además de la imposición de las correspondientes sanciones por infracción grave”. Finalmente, establece que “el inicio de la declaración de incumplimiento deberá causar asiento en el Registro de la Propiedad número 6 de los de Madrid, en cada una de las fincas afectadas incluidas en el PERI, a fin de proteger posibles adquirientes de buena fe”. Este escrito, tendente a anular la ejecución del PERI por el incumplimiento de la empresa Somersen es valorado desde la Junta Municipal de Tetuán, por parte de la concejal-presidenta, María Dolores Navarro, como “muy positivo y que tendrá muchas consecuencias. Por eso, creo que se ve algo de luz al final del túnel, después de llevar demasiado tiempo sin estar las cosas claras. Es cierto que el tema ha estado muy bloqueado y que ha habido mucho sinvergüenza en todo este proceso. No obstante, y desde mi punto de vista, lo fundamental es esta declaración de incumplimiento que causa asiento en el Registro de la Propiedad”. Además, y tal y como confirman los propios afectados, “el Registrador de la Propiedad número 6 nos ha ofrecido su colaboración y ha enviado a todos los juzgados donde existen procedimientos de nuestro caso, y son varios, una carta informativa a los jueces de los asientos que se han inscrito, de cara a las subastas. Esto es una realidad, y los jueces nos tienen que dar la oportunidad de llevar a trámite nuestros procedimientos para al menos poder defendernos legítimamente”. Además, puntualizan que “siempre hemos confiado en la justicia y ha de ser ella la que dé respuesta a esta inmoralidad que se está cometiendo con nosotros, la mayoría personas mayores, privadas de su propiedad y sin nada construido como se pactó”. Así están las cosas en el PERI Tiziano-Dulcinea, cuyo inicio data del año 1991. “El Escorial” de Tetuán todavía dará mucho que hablar, aunque al menos los afectados ya ven luz al final del túnel.

JUAN CARLOS M. J.