PÓKER DE DOSES DICIEMBRE 2016:

Un “Tigre” en Plaza de Castilla

–¡Hola PaSOtE! ¿Pero qué haces a estas horas de la noche (son las tres de la madrugada), todo vestido de negro por Bravo Murillo y con un martillo pilón?
–Nada, nada CIUDADANO García, tú a lo tuyo, como si no me hubieses visto.
–Bueno, te he visto de casualidad, porque vengo de un Comité Ejecutivo con PePita y mira qué horas nos han dado. Pero cuenta, ¿a quién o a qué vas a atizar con eso?
–Chisss (mirando para todas partes), no se lo cuentes a nadie, ¿vale?
–Claro, claro, si yo casi no hablo, soy una tumba.
–Ya… Bueno, voy a Plaza de Castilla; allí he quedado con el tIbU y su excavadora de pala mecánica, para hacer un trabajillo…
–(A grito pelao) ¡Pero suelta ya lo que es, hombre!
–Vale, vale, no grites. (Vuelve a mirar a todas partes). Vamos a tirar el obelisco del Calatrava ése, que todo lo que hace se cae, menos esto, qué mala pata.
–Anda, ¿y eso? ¿Qué daño os hace el palito?
–Pues al bolsillo de los madrileños mucho, porque es lo más inútil que se ha puesto en Tetuán: recuerdo ese 23 de diciembre de 2009 y al Rey Juan Carlos I mirando incrédulo la “majestuosa obra”, cuando la inauguró… En fin, que hay que poner algo que realmente nos represente a los tetuaneros.
–Ah, ¿y ya sabéis qué va a ser?
–¡Por supuesto!
–(Gritando otra vez) ¡Pero dilo ya, pesao!
–Chisss, una estatua de Manel Berdonce, el “Tigre” de Tetuán.
–¿Un tigre, en vez de un palito? No lo veo…
–¡Que no te enteras! Manel es el boxeador más importante que ha tenido y tendrá Tetuán, el que más años ha sido campeón de España de boxeo profesional, número uno de Europa y del mundo, entrenador del equipo olímpico español y ahora le han concedido la medalla de bronce de la Real Orden del Mérito Deportivo, el mayor galardón para un deportista.
–¡Toma ya! De todos modos, no creo que a pAndHORA y a su grupo les guste la idea; no son muy de apoyar el boxeo…
–¿Por qué te crees que voy a las tres de la mañana por Bravo Murillo vestido de negro?
–Ah, claro, ahora me encaja todo…
–Buf, no te enteras de nada. Me voy que tengo faena. ¡Ya es hora de que Tetuán rinda un merecido homenaje a nuestro “Tigre”!
–¡Yo también voy, ea! Me ha caído bien a mí el “Tigre” ése. Además, si es boxeador, será mejor llevarse bien con él…
–¡Hala, pues arreando, que es gerundio! ¡Feliz Navidad!

REY