Juan Carlos M. J. – 18/11/1996
Viven. Y nos veíamos Atrapados sin salida e inmersos en la más profunda Psicosis, en esta verdadera Jungla de cristal en la que nos movemos. Pericia una Misión imposible que todo aquello que El viento se llevó en esos Días de gloria pudiera tener una Restauración que nos ofreciese la posibilidad de Volver a empezar, Señoras y señores con todos ustedes ¡EL CINE! Bienvenido a casa.
Pues sí, aquí están ya. Y no uno si no dos. El Cristal convertido en un complejo de cinco salas y el Lido que tendrá siete. Unido al Novedades completan la actual oferta cinematográfica de Tetuán que estaba en Honor a la verdad casi Al borde de un ataque de nervios.
Muy lejos queda esta época en que nuestro barrio tenía 14 cines. Casi todos lo recordamos con nostalgia el Montija, Savoy, Chamartín, Tetuán, Europa, Samari, Carolina y alguno más. Era una Belle epoque que ahora está Escondido en la memoria.
Precisamente el ultimo que desapareció, había sido el Lido, el 5 de febrero de 1992, por lo que la proyección de películas era Cosa de dos, El Cristal y el Novedades se convertían en Tal para cual.
__El mes de noviembre de 1996 será recordado porque devolvió “El resplandor” ilusionado a todos los “Amantes” del cine.__
Por lo demás la gran pantalla se quedaba Sola en la oscuridad. Sin lugar a dudas el cine de Tetuán vivía con La muerte en los talones.
Pero ahora las cosas parecen haber cambiado, el mes de noviembre de 1996 será recordado porque devolvió El resplandor de ilusión y esperanza a todos los Amantes del cine. El Tiempo de silencio quedó atrás Atrapado en el pasado.
Esas 14 salas que hubo en su día se han vuelto a recuperar, de un modo distinto, pero válido, en cualquier caso.
Así es que podemos decir Borrón y cuenta nueva porque como en Casablanca esto “puede llegar a ser el principio de una buena amistad”.
YA SE VE EL CINE A TRAVES DE LOS <
Y precisamente esa buena amistad es la que debe reinar entre los vecinos de Tetuán y los cines Cristal, que por fin se inauguraron. El día 14 de noviembre a las ocho de la tarde fue el momento esperado.
Un gran cortinaje azul era la puerta que daba acceso a este acontecimiento. En la inmensa antesala jalonada por dos grandes mesas de cóctel, como la guardia de corps, los invitados se dirigirían al interior de los cines, arropados por una bóveda estrellada como queriendo homenajear a todas aquellas que habían brillado en el firmamento cinematográfico.
Después de visitar las cinco salas, de la que destaca la uno por su mayor aforo, en donde se hizo la presentación, se dio paso a las felicitaciones, comentarios, opiniones, todo ello en un ambiente distendido y agradable creado por los asistentes, 500 nada menos, entre los que se encontraban amigos, profesionales del mundo del cine, proveedores, clientes, personas que han trabajado día y noche para hacer realidad este sueño, acomodadores, camareras que van y vienen de un lado a otro con bandejas repletas de sabrosos aperitivos. Y en medio del clima creado, entre bocado y bocado se proyectaron dos películas de estreno. Así fue pasando esta noche mágico, que representa en palabras del dueño. Juan Ramón Gómez Fabra, “la culminación de un trabajo de muchos años, este día significa la materialización de un sueño”. Para él, estos van a ser unos cines de lujo, para la gente del barrio, con las últimas innovaciones tecnológicas, un fantástico sonido digital en toda la sala, butacas luminiscentes, ascensores para facilitar la entrada a los minusválidos, y un sinfín de comodidades. Al Cristal (ahora “Cristales”), como decía en tono de broma uno de los acomodadores, se les unirá a finales de este mes otra inauguración: la del Lido.
Los cines ya están en casa. Les deseamos mucha suerte y les damos las gracias por regresar.