RECUERDO A SOR TERESA
RAQUEL ARMENDÁRIZ, 7 de diciembre de 2008
Sor Teresa, a quien todo o casi todo el barrio conoce por el bien que ha hecho, pertenecía a las Hermanas de la Caridad, y estaba en la parroquia de Nuestra Señora de las Victorias de Tetuán. Este año se ha jubilado.
Pero antes de su jubilación, y a pesar de sus años y sus dolencias, ha estado llevando cáritas del barrio, además de un centro para niños con deficiencias psíquicas y físicas. Pese a todos los trámites que esto acarreaba, ella siempre tenía buenas palabras, una sonrisa y besos para los niños. Por ellos ha luchado con amor, a pesar de que como se sabe en este país la burocracia no hace mucho por las personas. Los niños, en su día y en agradecimiento a su labor, le hicieron un homenaje.
Ahora, hay personas a las que sigue ayudando, pese a estar jubilada: a ella no le importa ni la raza ni las creencias religiosas, cuando hay que echar una mano. Esta religiosa está dando, además de su ayuda, un gran ejemplo a todo el mundo, en especial a los servicios sociales del distrito.
Mis más sinceras gracias y mi homenaje a esta maravillosa persona, que trabaja con cariño y humildad.