En Tetuán siempre se ha hablado de dos realidades, de un distrito con dos caras, donde la arteria principal, la calle de Bravo Murillo, hace de frontera imaginaria entre dos zonas con realidades opuestas, marcadas incluso por diferentes poderes adquisitivos.
Sin embargo, la crisis ha sido capaz de acercar un poco más a las distintas barriadas que configuran Tetuán, en cuanto al recorte de los servicios al ciudadano que se han de prestar en aspectos como la iluminación de las calles, el estado de las aceras o la limpieza de los viales. Y no es de recibo pagar más impuestos, cuando se están recortando este tipo de servicios, tan necesarios en una sociedad del bienestar.
Así, y en lo relativo al tema de la limpieza, cada vez hay más quejas vecinales por la suciedad que se acumula en muchos puntos del distrito. Ya es denunciable que no tengamos “puntos limpios” fijos en Tetuán, pero de ahí a culpar de la situación al comportamiento incívico de unos cuantos, media un abismo. Lo cierto es que muchas de nuestras calles ya presentan un grado de suciedad inaceptable para una ciudad como Madrid, que es mucho más inaceptable e incomprensible todavía cuando vemos que el dinero de nuestros impuestos se derrocha en acciones tan inútiles como cambiar la estética de todas las paradas de autobuses. Más valdría que quienes gestionan las arcas municipales caminen un poco por nuestros viales, y empiecen a darse cuenta de cuáles son las verdaderas prioridades de los ciudadanos. Andar entre basura y por la noche casi a oscuras son, sin duda, temas mucho más importantes a resolver que tener nuevas marquesinas de autobuses.
Otra prioridad del distrito, y que ya ha dejado de ser prioridad para convertirse en urgencia, es la situación que se “malvive” en el paseo de la Dirección. Estamos en el siglo XXI, que nadie lo olvide, aunque realidades así nos hacen plantearnos si estamos en un país desarrollado o más bien en uno tercermundista, en el que los políticos son incapaces de dar soluciones –seguramente están más ocupados en “Tarjetas B” y en “Operaciones Púnicas”, que en trabajar por y para quienes les votamos−.
Afortunadamente, sí observamos un compromiso claro con el deporte en Tetuán. En esta materia sí hay “juego limpio” en el distrito. En este sentido, antes de que finalice el año, la instalación deportiva municipal Playa Victoria contará con una segunda pista de pádel, mientras que en las antiguas cocheras de la EMT en Cuatro Caminos se tiene previsto construir un polideportivo municipal, con piscina, sala de musculación, pistas de tenis…
Un compromiso que se habría de hacer extensible a otros temas de mayor importancia, para beneficio de todos.
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