En la calle de Carmen Portones hay un pequeño parque infantil, que debería ser objeto de más atención municipal. Después de cambiar los columpios y el tobogán que había, que eran de hierro y muy peligrosos para los niños, por unos más modernos y funcionales, ahora faltaría que se renovara el pavimento que lo rodea, que está en pésimas condiciones y provoca bastantes caídas.
Ya que el parque se renovó en su día, y ahora hay muchos más niños que juegan allí, no estaría demás cuidarlo un poco, para que disfruten y jueguen aún con una mayor seguridad.