EDITORIAL JUNIO 2018: Lo tengo “repe”

Al igual que cuando un niño se dispone a abrir con toda su emoción un sobre de ésos que tienen cromos de conocidos futbolistas en su interior y luego resulta que le salen algunos que ya tiene en la colección y su cara pasa a ser de desilusión, más o menos lo mismo nos pasa cuando acudimos a cubrir la información que se ofrece en los Plenos del distrito.   
Afortunadamente, las nuevas tecnologías permiten que ahora se puedan seguir en directo en streaming, con lo cual, si no interesa lo que se está diciendo, desconectas y a otra cosa. No obstante, es cierto que acudir físicamente, como medio de prensa, facilita esa posibilidad que jamás tendrán todos estos avances tecnológicos de poder hablar en directo con todos los representantes políticos de Tetuán.
Sin embargo, y desde el punto de vista de las noticias que se generan a raíz de la celebración de un Pleno, escasa información obtenemos para ofrecer a nuestros lectores, porque la mayoría de los temas que se tratan son una repetición de proposiciones que ya se han realizado en Plenos anteriores, de hace meses y, a veces, hasta de hace un año. Así, asuntos como la limpieza viaria, el estado de abandono de las calles secundarias del distrito, la eterna reforma de la Plaza de la Remonta, los contenedores… son temas recurrentes, repetitivos, que nos hacen poner esa misma cara de desilusión que ese niño que ve “repe” un cromo.
Menos mal que en el último Pleno del mes de mayo, pudimos asistir a una proposición de Ahora Madrid para que un espacio público del distrito lleve el nombre del añorado Leandro González, quien fuera vocal vecino de Izquierda Unida en la Junta de Tetuán en la década de los 90, fallecido en octubre del año pasado. Pudimos comprobar también la unanimidad de todos los grupos políticos, sean del color que sean, a la hora de votar favorablemente esta proposición y deshacerse en elogios hacia la figura de Leandro; políticos como él hacen falta hoy en día, íntegro de los pies a la cabeza y siempre pensando en hacer propuestas que beneficiasen la vida de los vecinos. Nosotros, desde estas páginas, también nos sumamos a esta iniciativa, con la única salvedad de que no nos gustaría que volviese a ser repetida en Plenos posteriores. Leandro no se merecería retrasos en esta cuestión, incluso hubiese sido de recibo poner su nombre en alguna de las calles de generales franquistas que acaban de cambiar su placa; bastante sufrió él el franquismo en la cárcel, como nos contó en una larga entrevista de más de dos horas en su casa. Sólo queda por saber qué espacio público de Tetuán llevará el nombre de este vecino y esperemos que sea uno importante, significativo y que haga honor a la memoria de Leandro.
En cualquier caso, en ‘Tetuán 30 días’ intentamos que ustedes no pongan esa cara de desilusión, ni digan aquello de “lo tengo repe”, ya que cada nuevo número, desde hace 24 años ya, intentamos que sea diferente y, sobre todo, aporte información relevante y de calidad a nuestros vecinos.