“Mire vuestra merced, que aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino niños”

Don Quijote y Sancho Panza, estrellas del Día del Niño

No sólo “decir la verdad” une a niños y locos, según el dicho popular. También la ilusión. Y de eso algo sabía Don Quijote de la Mancha, protagonista del acontecimiento infantil más importante de la capital, el Día del Niño, cuya XXXIV edición se celebró el pasado 3 de mayo por la arteria principal del distrito, la calle de Bravo Murillo.

Se cumplen 400 años de la publicación de la segunda parte de la obra cumbre cervantina, y la efeméride se prestaba a juntar “en un lugar de Tetuán” al Ingenioso Hidalgo y a su inseparable Sancho Panza con los gigantes –que no molinos– Tetu y Tuán. Precisamente las mascotas del distrito ejercieron de anfitriones de los cabezudos cervantinos, llegados desde Alcalá de Henares para la ocasión.

“Si siempre hay motivos para homenajear a Cervantes y a su criatura literaria, más aún con un aniversario de estas características de por medio”, ha señalado Paloma García Romero, concejala-presidenta de Tetuán. 

Los tres kilómetros de Bravo Murillo entre Plaza de Castilla y Cuatro Caminos fueron escenario de decenas de actividades, espectáculos y exhibiciones “quijotescas”. Los pasacalles, títeres, música, baile, hinchables y talleres educativos no faltaron a la cita, como tampoco los organismos públicos, instituciones y oenegés en esta gran fiesta para los niños que cada año organiza la Junta de Tetuán.

Historias del caballero andante

La jornada contó con 14 actuaciones infantiles repartidas en tres escenarios, así como atracciones y actividades deportivas en la calle y en la piscina del polideportivo Triángulo de Oro. Entre las novedades destacaron las historias del caballero andante que amenizan habitualmente el trayecto entre Madrid y Alcalá de Henares del “Tren de Cervantes”; también regresó el TeatroBus, con seis pases de la función “Viajando con el Quijote”, en torno a la calle de Sor Ángela de la Cruz. Del cierre de la jornada se encargó el grupo Zascanduri y su espectáculo “Venimos de Dancilandia”.

El Caballero de la Triste Figura regresó entonces a su estepa castellana, feliz por alegrar el día a los más pequeños y tras sentirse como en casa en este “poblachón manchego”, como llamaba a la capital uno de sus cronistas más célebres.

Tetuán 30 días / Fotos: Pedro Carrero.