Con el panorama mundial tan revuelto últimamente, sacudido por la incomprensible invasión de Rusia a Ucrania en pleno siglo XXI, con la covid-19 todavía acechando, aunque parezca que ya no existe la pandemia al quedar relegada al segundo plano informativo, con la huelga de los transportistas, la escasez en el suministro de leche, aceite, los precios de la luz, gas, gasolina… subiendo y muchas familias haciendo encaje de bolillos para llegar a fin de mes, todavía tenemos que informar de las decisiones que se están tomando en dos asuntos tan importantes para la ciudadanía, como son la Educación y la Sanidad, y que, además, nos tocan muy de cerca a los tetuaneros.
Vayamos por partes. En materia de Sanidad, los vecinos de Tetuán siguen en la lucha por que se reabra el Centro de Salud Villaamil, cerrado en junio de 2021, sin que todavía se den soluciones desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Una manifestación tras otra desde hace 10 meses, convocadas por las asociaciones vecinales de Cuatro Caminos-Tetuán y Huerto Urbano La Ventilla, son la reivindicación palpable de que nada ha cambiado desde entonces, y no sabe a ciencia cierta si el centro de Villaamil volverá a abrir sus puertas, se abrirá otro centro frente al polideportivo Playa Victoria, se abrirán los dos… Mucha incertidumbre, que hace que el movimiento vecinal continúe echándose a la calle, hasta que las promesas políticas se conviertan en realidad.
Y vamos ahora con la Educación… La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha decidido cerrar las escuelas infantiles públicas de 3 a 6 años; una medida que afecta a nueve centros, entre ellos dos de nuestro distrito: Los Ángeles y La Plazuela. Ante tal decisión, los afectados llevan movilizándose desde que en noviembre se dio a conocer esta posibilidad, que hoy ya es real: recogida de firmas, recurso contencioso-administrativo… llegarán adónde haga falta, protestando “como si fuéramos críos”, señalan.
Y siguen las protestas vecinales… También por parte de la plataforma que se ha constituido al hilo de la reforma que se está acometiendo en la avenida del General Perón, donde observan deficiencias, por ejemplo, en las zonas de juego proyectadas, los desvíos de tráfico, las plazas de aparcamiento, el mantenimiento de las pistas deportivas… y así se lo han hecho saber al Ayuntamiento, que ya les ha respondido por carta, asegurando que “atenderemos la mayore parte de estas demandas”. Cuando acabe la reforma, lo veremos.
Y más protestas, esta vez los vecinos de Tetuán y de Moncloa-Aravaca juntos, exigiendo que la piscina conocida como El Quijote, en Numancia, 1, reabra sus puertas este verano, después de permanecer cerrada y en el ostracismo desde agosto de 2019.
En definitiva, quejas y más quejas, que demuestran que el tejido asociativo y el movimiento vecinal están vivos, y que hay asuntos con los que se juega, como la educación y la salud. Toca seguir en la lucha e informando de todo ello.